Inteligencia, culpa, castigo y soledad
El mundo de Yarek es una novela corta de Elia Barceló, escritora valenciana de ciencia ficción. Recomiendo su lectura. A mi, personalmente, me sorprendió muy gratamente. No sólo por su lectura ágil y entretenida. Sino también por los dilemas y reflexiones que plantea en sus páginas.
Quizás el giro final del libro es lo más controvertido. A mí me dejó con la miel en los labios. Deja muchas posibilidades y enigmas abiertos que se podían haber desarrollado y resuelto de otras muchas maneras más interesantes. Pero yo no soy escritor y es una cuestión de opiniones. De hecho, su final condensa una de los grandes reflexiones del libro: la realidad, la irrealidad, el castigo y la culpa...
En el mundo de Yarek
Lennart Yarek es un reputado y famoso xenólogo. Es decir, su trabajo consiste en catalogar y clasificar a las especies que habitan el universo y determinar si son especies inteligentes. Es el mejor en su campo. Y no sólo lo dice él. Así lo atestigua su tremenda reputación.
Sin embargo, ha sido exiliado. Durante 20 años deberá vivir completamente sólo en un planeta deshabitado e inhóspito, el planeta Yermo. Si sobrevive, le volverán a buscar.
Durante esos 20 años, no podrá comunicarse con el exterior, pero sí estará al tanto de todo lo que suceda en el resto del universo y dispondrá de todo lo que necesita para su subsistencia. Su única compañía será un ordenador llamado por él mismo Buitre (por una razón). Durante su estancia, pasará por distintas fases provocadas por sus remordimientos, su orgullo y su aislamiento.
Inteligencia en Viento
Yarek nos irá explicando los motivos por los que ha sido castigado de manera tan brutal.
Yarek fue acusado de catalogar como no inteligente una especie de buitres del planeta Viento. Por eso a su ordenador lo llama precisamente Buitre.
Como iremos averiguando, estos buitres ahora están extintos, se suicidaron en masa y se consideró a Yarek responsable de ello. Sabremos que su decisión de no considerarlos inteligentes beneficiaba a los partidarios de utilizar el planeta Viento como nuevas tierras para la colonización. Pero también sabremos que Yarek no había sido sobornado.
Tampoco quedará claro que realmente los buitres fueran inteligentes. La xenóloga que se opuso a Yarek y ahora está investigando los restos dejados por los buitres parece que también tenía sus propios intereses egoistas.
Yarek y los profesores universitarios
Pero Yarek desde luego no es un ser inocente que simplemente cometió un error. Sin admitirlo abiertamente, la culpa le corroe y está siempre presente.
Barceló nos presenta a Yarek como el prototipo del pedante y pretencioso profesor universitario. Embriagado por su éxito. Consciente de su capacidad. Un individuo que ha renunciado a su familia por alcanzar su posición. Una persona que no ha dudado en utilizar su posición para llevarse mujeres a la cama y para disfrutar de su fama. Y por eso está solo, sin amigos ni nadie que acudiera en su defensa.
Y Yermo pondrá a prueba su salud mental. La desesperación, el fatalismo, incluso los pensamientos suicidas, se suceden a momentos de lucidez, de organización e incluso a momentos en los que planificará su venganza.
Pero también de duda, muchas dudas de por qué está allí.
Seres inteligentes
Está claro que los humanos somos seres inteligentes. Pero cuando entremos en contacto con otros seres, marcaremos inevitablemente la definición de inteligencia en base a nuestros propios parámetros. ¿Y si no fuera así? ¿Y si estamos equivocados?
Imaginemos una civilización alienígena que llega a la Tierra y considerara, por ejemplo, que chimpancés y delfines también son inteligentes. O viceversa, contemplan nuestra cada vez mayor dependencia de lo artificial, o nuestro empeño en destruir el planeta y a otras especies animales o matarnos mutuamente, y resuelven que son muestras evidentes de que no somos tan inteligentes.
Yermo nos traerá muchas sorpresas. Y Yermo demostrará que Yarek no es tan brillante como él mismo se pensaba. Su ceguera contrastará con la facilidad con la que el lector sabrá identificar a la verdadera especie inteligente del planeta. Y es que los humanos nos dejamos inevitablemente deslumbrar por los cliches que tenemos como humanos.
El homenaje que el propio protagonista hace a los elois de H.G. Wells de La máquina del tiempo, es muy revelador.
Pero también será una medida de la desesperación de Yarek y de su capacidad para la redención. De ser capaz de violar, o practicar la zoofilia según se mire, a saber controlarse y preocuparse por otros antes que de sí mismo. Y siempre presente, la culpa, la esperanza, trazar planes o dejarse arrastrar creyendo que no hay salida.
Crimen y castigo
La humanidad tiene el ojo por ojo grabado a fuego en su historia. Yarek no será el primer exiliado. No será la primera persona abandonada a su suerte sin otra perspectiva que la muerte.
Sorprende que en una sociedad futura, que parece respetar tanto la vida inteligente, se practique un castigo tan bárbaro, tan primitivo como el que realmente sufre Yarek. Además, cuando sus propios torturadores reconocen que a nadie ya le importa la causa por la que le castigaron.
El desarrollo tecnológico, ya sea una nave espacial, o una realidad virtual simulada, parece que nos permitirá encontrar nuevas formas para torturar y castigar a nuestros semejantes. Es una temática recurrente en Black Mirror, por ejemplo. Recuerdo en especial el capítulo White Bear.
¿Malo por naturaleza?
Muchos filósofos afirmarán que la venganza, el odio, la búsqueda de la justicia, la violencia... son características innatas de un ser inteligente, en contraste con los animales. Yo creo que estas categorías son representaciones "civilizadas" de la vieja lucha por la supervivencia. Aún la sufrimos no sólo en nuestra naturaleza, sino sobre todo en nuestra sociedad.
Y si en el futuro tenemos una sociedad donde ya no sea necesaria esa lucha por la supervivencia... quizás no sean necesarias nuevas formas de torturas, de castigos y de venganzas. Seguro que entonces tampoco provocamos extinciones masivas de especies, sean inteligentes o no.
¿Y tú qué opinas de todo esto? ¿Has leído El mundo de Yarek? ¿Qué te ha parecido?
Ficha del libro:
El mundo de Yarek
- Autora: Elia Barceló
- Fecha de publicación: 1994
- En España: Lengua de trapo, ISBN 9788496080553
- 1er Premio UPC en el año 1993